El comercio es el motor de la economía. Sin intercambio de mercaderías no habría desarrollo en los países y el barco fue y será probablemente por siempre el medio más eficiente para transportarlas. Sin embargo, tiene un problema, solo se mueve por el agua y esto implica que sus rutas se reducen a ríos, mares y océanos. En general esto no resulta un problema, salvo en una excepción: América es un continente continuo que recorre longitudinalmente toda la Tierra de Polo a Polo, atravesarla para llegar del otro lado por el océano implicaba llegar a los confines australes del planeta. Al menos hasta que se creó el Canal de Panamá, la solución humana para el capricho de la geología terrestre.